¿Jugamos al bingo?

¡Buenos días de lunes!

Hoy vengo con una entrada algo diferente. Como ya sabréis, me dedico al mundo de la educación. Me paso el día estando con alumnos desde 1º de Educación Primaria a 4º de Educación Secundaria Obligatoria y algún niño de Educación Infantil de vez en cuando. ¡La verdad es que no me da tiempo a aburrirme!

Cuando estoy con los alumnos de primaria es en pequeños grupos para los que necesitan refuerzo psicopedagógico (atención, memoria, comprensión verbal, inversión/omisión de letras, habilidades sociales...). Tengo la suerte de no tener que completar un temario como el resto de los maestros de primaria y puedo ir ajustando las sesiones según sus necesidades. Además, no tengo libro y voy preparándome las actividades según lo que quiero trabajar. 

La semana pasada preparé un BINGO SILÁBICO. 

A los niños siempre les encanta descubrir cajas misteriosas ☺

¿De qué se trata? Cambiar las papeletas de números que podemos encontrar un bingo por sílabas diferentes, aunque muy parecidas para que estén bien atentos. La complejidad de las sílabas depende del curso con el que trabaje: directas (sí, la, ra...), inversas (er, an, os...), mixtas (pal, tes, tor...) o trabadas (bra, ple, tro...). 

• Caja de Selfpackaging para guardar el bingo silábico. 
• Decoraciones de la caja: Abecedario, pegatina de bola de chicles de October Afternoon, washitape de estrellas.
• Fichas: Troqueladora de estrellitas y papeles de colores.
• Listado doble de sílabas: unos irán en trozos doblados y otros plastificados (así conseguimos que duren más).

Las reglas del juego son muy sencillas...

¿Material listo? ¡A jugarrrr!

1. Se reparte una línea del bingo a cada alumno. Son menos casillas que en otros bingos para que dé tiempo a hacerlo en una sesión. 
2. Se saca un papel y se dice la sílaba en voz alta. El alumno que la tenga en sus casillas, ha de levantar la mano y decir una palabra que contenga esa sílaba antes de conseguir el punto. Por los nervios hay veces que no se fijan y no es la misma sílaba, ven "pal" en vez de "pla" (vamos, quieren ver la suya para ganar jeje).
3. Si la palabra es correcta, consigue una estrella que pone sobre la sílaba que ha conseguido. Si no, se pasa a otra sílaba nueva.
4. El juego se acaba cuando nos quedamos sin papeletas en la caja o alguien consigue terminar su línea. ¿El premio? Mis alumnos están encantados con mis troqueladoras y les encanta llevarse mariposas, flores o cualquier cosa troquelada como premio. Sino, algo de material escolar también va bien. 

Podemos ir añadiendo más silabas, ¡hay espacio de sobra!

Como nuestras fichas son tan económicas, se pueden llevar las estrellas al acabar la partida o decorar la clase con ellas. 

Cuando terminamos la partida, todo cabe perfectamente dentro de la caja.

¿Qué trabajamos con este bingo silábico? Atención, vocabulario, velocidad mental, conciencia silábica, errores ortográficos, inversiones de letras, respeto en el turno del juego... Además es una excusa perfecta para que ellos se relacionen entre sí y pierdan la vergüenza a hablar en clase. 

Está claro que jugando también se aprende. Ellos encantados y yo también. 

¡Muchas gracias a todos por las visitas y comentarios! ♥ Por cierto, la semana que viene nos veremos el MARTES en vez de lunes, ya veréis por qué. ¡Feliz semana!